El programa Mindful Self-Compassion (MSC) fue desarrollado por Christopher K. Germer, PhD, profesor de Harvard y experto en la integración de mindfulness y psicoterapia, junto con Kristin Neff, PhD, profesora en la Universidad de Texas en Austin y pionera en la investigación de la autocompasión. Su enfoque combina dos habilidades esenciales para el bienestar emocional: atención plena (mindfulness) y autocompasión, proporcionando herramientas efectivas para cultivar la resiliencia en el día a día.

Mindfulness: el primer paso hacia la sanación emocional

La atención plena nos ayuda a tomar conciencia de nuestros pensamientos y emociones, incluso cuando son difíciles o dolorosos. Nos permite observar sin juicio experiencias como la tristeza, la ansiedad o la confusión, acogiendo lo que sentimos con una actitud de apertura y curiosidad.

Autocompasión: tratarnos con amabilidad en momentos difíciles

La autocompasión es la capacidad de responder a nuestro propio sufrimiento con comprensión y amabilidad, en lugar de con autocrítica o rechazo. Nos brinda el apoyo necesario para calmarnos y reconfortarnos en tiempos difíciles, fortaleciendo nuestra capacidad de recuperación emocional.