Te propongo que seas honesta, honesto contigo misma, mismo, que investigues tu interior sin juzgarte, sin recriminaciones, sin justificaciones.
De esta forma puedes ver de forma más clara qué camino has hecho para llegar a sentir soledad.
No le des muchas vueltas, no hace falta realizar un estudio muy profundo, hace falta, solamente, ser sincero con uno mismo y enseguida descubres aquello que te va viniendo y sabes que es allí donde está el “quit” de la cuestión.